martes, 18 de diciembre de 2018

Existen tantas angustias que ya ni sé como debo llorarlas. 
A veces creo que de pronto despareceré 
simplemente me esfumaré
y reapareceré siendo una pequeña gota de agua
en el más vasto y oscuro océano
seré desde la superficie
para luego sumergirme a ese fondo inconcebible
dónde ningún ser humano se ha atrevido a adentrarse
dónde ningún ser humano sabe qué hay allá
y entonces,
no deberé de llorar, 
porque ya seré el llanto de la tierra. 

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